Sobre la pérdida del patrocinio de Unicaja por el Oviedo Baloncesto: los hechos, el síntoma y el símbolo
Los hechos son los siguientes: De un lado, el Oviedo Baloncesto lleva 9 temporadas ininterrumpidas en la Liga Oro y 7 de ellas jugó los play-off para colocarse en la élite del baloncesto español. Hasta ganó una Copa Princesa. Su presupuesto no llega a los 900.000 euros de los cuales más del 75% lo aportan los socios y los patrocinadores privados. Además del equipo profesional tiene otros 25 equipos con casi 500 jugadores juveniles. Es un éxito de la sociedad civil, gestionado con honradez, transparencia y austeridad. Sin deuda, sin escándalos, sin dependencia de lo público. Un ejemplo de lo que necesitan Oviedo y Asturias para detener la decadencia y crear un futuro distinto. Un modelo digno de apoyar por el cambio de mentalidad que representa en una sociedad derrotada y victimista como la nuestra.
Del otro lado, Unicaja/Liberbank patrocinó con 120.000 euros esta temporada al equipo a cambio de que llevara su nombre. Justo cuando se clasificó para el play-off anunciaron que retirarían el patrocinio por cambios en su política de marketing. La citada política de marketing implica cancelar el apoyo a todos los equipos asturianos que sumaba menos de 300.000 euros mientras se mantiene el apoyo al Unicaja Málaga de baloncesto con 7 millones de euros y aparentemente a otros equipos andaluces como el Unicaja Voleibol de Almeria.
“Esta falta de sensibilidad con Asturias y este agravio discriminatorio corresponde a Manuel Menéndez, CEO de Unicaja”
Esta decisión, esta falta de sensibilidad con Asturias y este agravio discriminatorio corresponde a Manuel Menéndez, CEO de Unicaja, ex presidente de Liberbank y Cajastur. Merece la pena recordar que más allá de sus méritos profesionales, llegó a su puesto original con el apoyo del parlamento asturiano y los ayuntamientos de Oviedo y Gijón.
El hecho de que Unicaja se proponga hacer esto y piense que le va a salir gratis es un síntoma claro de lo anestesiada y desarmada que está la sociedad asturiana. Me consta que tanto el Presidente del Principado como el Alcalde de Oviedo fueron advertidos por el club desde el minuto uno de la decisión de Manuel Menéndez. También me consta que ambos están tratando de apoyar al Oviedo Baloncesto e incluso valorando la posibilidad de complementar con más ayuda pública la deserción de Unicaja. Pero ese no es el camino. La idea no es, una vez más, que lo publico acuda al rescate. Lo que sugiero a Barbón y Canteli que hagan es que se planten ante Unicaja, que exijan a la Fundación Cajastur, titular opaca de los restos de lo que un dia fue una Caja de todos los asturianos, que ejerzan como defensores de esos intereses y no de los de Manuel Menéndez y los ejecutivos que lo acompañan. Como lideres políticos de Oviedo y Asturias no pueden aceptar en silencio una discriminación tan grosera como esta en la que se niegan 120.000 euros al Unicaja Oviedo Baloncesto mientras se mantienen 7 millones al Unicaja Málaga.
La buena noticia, que también las hay, es que algunas empresas asturianas están dirigiéndose al Oviedo Baloncesto y ofreciendo ayuda para cubrir la defección de Unicaja/Liberbank. Hay que apoyarlas. El Oviedo Baloncesto puede ser uno de los símbolos de que Oviedo y Asturias todavía tienen arreglo, de que es posible soñar con un futuro mejor, que todavía hay partido y que la sociedad civil puede revertir el estado comatoso de la Asturias que nos tocó vivir.
No considero necesario entrar en detalles de como Unicaja acabó siendo la estación de llegada de lo que un día fue Cajastur y después Liberbank. De como mientras Manuel Menéndez se apuró a trasladar la sede social de Oviedo a Madrid ahora gestiona un banco fusionado desde Málaga y así hasta el aburrimiento. Es el momento de decir basta, de no aceptar más humillaciones y de poner en valor lo que Oviedo y Asturias son y representan, nos jugamos mucho, hoy con el Oviedo Baloncesto, mañana con lo que corresponda.