«Hay una situación de crisis muy grave. Lo que hagamos o dejemos de hacer en los próximos años va a condicionar el destino de Llanes»
«El otro cambio que se ofrece es Trevín, que con todo el respeto, es un retorno al pasado»
Convencido de la importancia de los «grandes acuerdos», de la necesidad de escuchar a la sociedad civil y de aportar la visión del empresario a la administración, José Alberto Concha (México, 1967) da el paso desde el sector turístico a la política. Hijo de «uno de los últimos indianos en el sentido tradicional», a lo largo de su vida ha residido en Llanes y Madrid y ha gestionado hoteles de la empresa familiar. Hasta enero fue copresidente de Otea Allares, cargo al que renunció para aspirar a la Alcaldía por FORO Llanes.
–¿Por qué dar ahora el salto a la política?
–Veo que hay una situación de crisis muy grave. Lo que hagamos o dejemos de hacer los próximos años va a condicionar el destino de Llanes. No me resigno a quedarme en casa viéndolo venir o criticándolo desde el chigre. Creo que Llanes necesita ahora mismo un cambio, una ilusión y un programa estratégico, de futuro. Nosotros lo llamamos ‘Llanes calidad’ y se refiere a que en este entorno maravilloso que tenemos nos acompañen los servicios básicos del estado de bienestar y las infraestructuras para que sea realmente posible un proyecto de vida.
–¿Cuál es su diagnóstico de la situación en los distintos sectores?
–El principal problema que hay es el de la gobernanza. Lo primero que hay que hacer para solucionar un problema es hacer un diagnóstico y para ello hay que preguntar a la gente que sabe. Veo que no se cuenta con las asociaciones empresariales, ni con los alcaldes de barrio ni con los clubes deportivos o con los diferentes sectores. Lo segundo es saber pedir las cosas y ver cómo se enfocan esas peticiones. Muchos aspectos no dependen solo de la administración local y no vale con decir que el presidente del Principado no me recibe o escurrir el bulto, necesitamos capacidad para generar grandes acuerdos en el propio Llanes y, con eso, exigir que se hagan inversiones o que se dote de los recursos necesarios. Dentro del programa de ‘Llanes calidad’ planteamos una serie de mesas sectoriales para que la gente que conoce los problemas aporte soluciones. Planteamos una mesa en la que incorporaremos a todos los partidos. Después de las elecciones, que todos seamos del partido Llanes para defenderlo en Oviedo, Madrid o Bruselas por encima de las siglas. Otro de los graves problemas es que Llanes es un territorio hostil al emprendimiento y a la empresa.
DESESTACIONALIZACIÓN: «Es heroico mantener un negocio. Tenemos que ayudar a las empresas»
–¿Por qué lo cree así?
–Porque aquí es heroico mantener un negocio y levantar la persiana. Tenemos combatir eso a través de talento, ayudar a las empresas y trabajar en la desestacionalización. No hay ninguna empresa que por abrir en invierno tenga absolutamente ninguna ventaja. Tenemos que utilizar el turismo: entre el 70 y el 80% de la riqueza que se produce en Llanes está ligada al turismo, entonces tenemos que cuidarlo. Es un sector muy transversal y afecta a todos. Hay que hacer que sea una palanca de desarrollo para el sector primario.
–Algunas de esas iniciativas se habían probado durante la pandemia. ¿Qué pasó?
–Hubo un consejo social que yo presidí y la situación era tan dramática que planteé una forma de democracia muy antigua, cuando en los ‘conceyos’ abiertos las decisiones se tomaban por unanimidad. Incluso Vox y Podemos se sentaron a la misma mesa y los que rompieron la unanimidad fue Vecinos por Llanes, el partido del alcalde. En el momento en que renuncian a estar en ese consejo social yo renuncio también a presidirlo porque se podría convertir en un órgano no solo de oposición, sino alternativo a las propias instituciones democráticas.
–Con esos antecedentes respecto a partidos en el gobierno, ¿qué baraja si se da la oportunidad de repetir coalición?
–Me presento con la ilusión de ser alcalde si mis vecinos quieren. Sé que es complicado, pero si algo nos enseña la Historia es que David ganó a Goliat. A partir de ahí, yo no voy a participar en un gobierno Frankenstein. Si creyera que la gestión de estos últimos ocho años ha sido buena, no me presentaría. Me presento porque creo que el deterioro de Llanes es grande y que necesita un cambio. Es cierto que FORO estuvo en el cuatripartito, pero se ha refundado. No queda nada del FORO del cuatripartito y yo no estaba. El otro cambio que se ofrece es Trevín, que con todo el respeto, es un retorno al pasado.
Proyecto ilusionante
–Le traslado una pregunta que está en la calle. ¿Facilitaría un gobierno del PSOE?
–Nosotros lo que tenemos que estudiar es cuál es el resultado. Creo que van a ser unas elecciones muy abiertas. Lo del cuatripartito tengo que decirlo ya que no lo repetiría porque no veo el cambio. También soy crítico con el retorno al pasado. Tendremos que ver dónde nos pone a cada uno los llaniscos y lógicamente será su voluntad la que habrá que respetar y ofrecer la mejor gobernanza posible.
–Tras estos años complicados por la salida de miembros, ¿cómo encuentra a FORO en Llanes?
–FORO es imprescindible. Estamos empezando a atraer a gente joven, es un proyecto ilusionante y todos aquellos que crean que hace falta un cambio y no ser solo espectadores, sino partícipes para asegurar un futuro para un Llanes mejor, tienen mi mano abierta y estoy a su disposición.
–¿Algún nombre definido?
–Quiero ser muy prudente, no quiero adelantar nada sin definirlo con ellos y con la gente del partido.